chisteEl pasado día 28 de marzo, tal y como anunciamos en un post anterior, Manuel Mata Pastor vino a Valencia a dar una charla sobre Localización. Aunque el taller sólo duró 4 horas y no hubo mucho tiempo para hacer prácticas, sin duda fue una excelente introducción al mercado de la localización y sus conceptos básicos. Es un poco difícil resumir la charla ya que se hablaron de numerosos temas, pero a continuación paso a comentaros los puntos más destacados.

  • Para empezar se hizo una breve introducción teórica sobre los conceptos de globalización (g11n), internacionalización (i18n) y localización (l10n) y de la evolución de este mercado, que aunque teóricamente existe desde el primer momento en el que se empezaron a desarrollar herramientas informáticas y hubo necesidad de vender éstas en otros mercados, empezó a despuntar realmente a finales de los 90, sobre todo en el área de Irlanda, debido a las enormes facilidades que el gobierno de este país prestó a las empresas de software. Se habló de la diferencia entre localización y traducción, dicotomía que algunos autores ven de manera clara (como Manuel) y que otros no tanto (como Brian Mossop). También se discutió el concepto de traducción subordinada (o constrained translation, término introducido por Christopher Tilford en su artículo Subtitling-Constrained Translation), entendida como el tipo de traducción que está subordinada de manera inseparable a un soporte y que la “restringe”, bien por temas de espacio, bien por restricciones propias del medio como el movimiento de la boca en el doblaje (p.e. la traducción audivisual, la de videojuegos o la de software, que es el caso que nos ocupa).
  • Otro de los temas que se trató fue la diferencia de traducción entre software y páginas web. En cuanto a la traducción de páginas web y esta dualidad en la localización, os recomiendo el artículo de Manuel Mata «Traducción y localización de contenido Web», en Reineke, Detlef: Traducción y localización: mercado, gestión y tecnologías, en el que se tratan con detalle todos estos aspectos. Al respecto se estuvieron discutiendo las diferencias fundamentales entre la localización de páginas web y de software. En el primer caso, nos encontramos con menos restricciones de espacio y “formales” pero con mucha más variedad temática y de tipología textual (en una página web nos podemos encontrar con prácticamente todo tipo de textos, desde literarios hasta técnicos, pasando por humorísticos o jurídicos). Otra de las características de este tipo de “género” es su frecuencia de actualización, que en algunos casos puede llegar a ser continua, sobre todo cuando tratamos con páginas web dinámicas (para ver la diferencia entre páginas web estáticas y dinámicas, ver el siguiente punto). En cuanto al software, se trata de un tipo de traducción más restringida, de tipo eminentemente técnico, con menos actualizaciones y que suele requerir software más específico para su localización.
  • En cuanto a la traducción de páginas web es importante distinguir entre webs estáticas y dinámicas. La diferencia es principalmente que en el primer caso, los archivos de las estáticas están en el servidor y cuando nosotros accedemos a ellas desde nuestro ordenador “cliente”, creamos una réplica que vemos a través de nuestro navegador. En el caso de las webs dinámicas, las páginas que vemos son una “ilusión”, ya que éstas se crean “on the fly” al recibir una solicitud del cliente. Para ello, se cuenta con una especie de formulario en HTML u otro lenguaje de marcación que se cumplimenta con datos extraídos de una base de datos o una aplicación que se ejecuta en ese momento. Imaginaos por ejemplo las páginas de agencias de viajes o de empresas de transporte, que nos ofrecen los datos más actuales según la consulta que hagamos. Pues bien, en el caso de las webs estáticas, para poder traducirlas adecuadamente sin tener que copiar y pegar todo el contenido en un editor de texto, tendremos que o bien pedirle al cliente toda el sitio web, bien descargarlo con algún programa del tipo WebBudget o HTTrack. En el otro caso, de webs dinámicas, para poder traducir los datos de la base de datos o aplicación, tenemos, según Manuel tres opciones fundamentales: que el cliente convierta los datos de la base de datos a formato TXT o XLS (Excel), nosotros lo traduzcamos y él lo incluya en la aplicación; que nos desplacemos hasta las oficinas del cliente y traduzcamos in situ, en el mismo servidor donde está alojada la base de datos o las aplicaciones; utilizar un CMS (Content Management System) o, mejor aún, un GMS (Global Management System), aplicaciones que gestionan contenidos (en el último caso de tipo multilingüe, con conexión a memorias de traducción, traducción automática, terminología etc.) y que pueden accederse a través de la web. Un ejemplo es el de POLYCOM.
  • Una de las cuestiones que también surgieron en la charla fue la de los estándares propugnados por LISA y OASIS, que cada vez se están imponiendo más en el mundo de la localización y que sin duda contribuyen a una estandarización de los procesos y a una capacidad mucho mayor en la transferencia de datos. De algunos estándares como TMX o XLIFF ya hemos hablando en el blog y de otros como GMX o SRX hablaremos próximamente.
  • Se habló también de numerosas herramientas para el proceso de localización, desde herramientas para la traducción de páginas web, editores de recursos, descompilador de archivos de ayuda, utilidades para Flash etc. De todas estas herramientas iremos hablando poco a poco en el blog.
  • Con respecto a las herramientas y también a la localización de software, Manuel nos destacó también la importancia del procesamiento de imágenes en la localización. Dependiendo del producto, podemos encontrarnos con la necesidad de trabajar las imágenes por capas (si el cliente nos proporciona el archivo adecuado), de tener que hacer numerosas capturas de pantallas (simples o más sofisticadas, con recortes etc.). Al respecto Manuel ha publicado muy recientemente un artículo en la nueva revista de la Universidad de Málaga, Entre culturas. Así pues que este punto sirva además de recomendaros el artículo (dividido en parte I y parte II), para anunciaros el nacimiento de esta nueva revista que al parecer tiene muy buena pinta (todavía no he tenido tiempo de leerme los artículos, pero bueno, tiempo al tiempo).
  • Para terminar, uno de los temas más prácticos fue la importancia de realizar un presupuesto profesional y de llevar a cabo una buena gestión de proyectos en un encargo de localización. Es importante que, cuando nos llegue alguna petición de este tipo, seamos conscientes de la diferencia entre los servicios que ofrecemos como traducción propiamente dicha, y los servicios “añadidos” que pertenecen a la localización, como puedan ser ingenieria o rediseño, testing, procesamiento de imágenes, control de calidad, gestión de proyectos… Todos estos servicios no son traducción propiamente dicha pero pueden darle un valor añadido a nuestro negocio. Según Manuel, la prestación de estos servicios puede suponer hasta un 70% del encargo y pueden sin duda ayudarnos a afianzar nuestra imagen de profesionalidad y saber hacer frente al cliente.

Bien, creo que estos son los puntos más importantes que se trataron en la charla. Espero que os hayan resultado interesantes y hayáis aprendido un poquito más sobre este apasionante mundo.

¡Gracias Manuel por tu amabilidad y tus ganas de compartir conocimientos!.