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Filed Under (Herramientas TAO, Marcas, Software, Wordfast) by Laura on 14-01-2009

Wordfast

El pasado día 1 de enero Wordfast lanzó una primera versión de Wordfast Professional 6.0. Al contrario que las versiones anteriores, que utilizaban el editor de MS Word para trabajar,  la nueva aplicación está basada en Java y, por ello, es independiente y multiplataforma. Es decir, tanto los usuarios de Windows como los de Mac OS X y Linux podrán trabajar con ella (hay que añadir aquí que la última versión de Classic, 5.53q, parece ser que también funcionaba ya para Mac y Linux). 

La última versión 6.0 puede descargarse desde el sitio de la empresa junto con una licencia de prueba cuya duración expira el 31 de enero de 2009. Así que si queréis probarla, ¡no tardéis mucho! La ayuda la tenéis en este enlace.

Vamos a repasar las ventajas de esta nueva aplicación:

  • Como hemos comentado, es multiplataforma, así que no está sólo limitada a los usuarios de WIndows.
  • Otra de las ventajas importantes es que podrán traducirse más formatos: doc, .ppt, .xls (es decir, Word 97/2003) y txml (un formato propietario de Wordfast). Asimismo, parece ser que está previsto, aunque en los foros se afirma que ya están disponibles, que puedan leerse otros formatos como .html, .xml, .asp, .inx, .jsp e incluso .mif, aunque la versión que yo me he bajado no los incluye todavía.
  • Una interfaz más intuitiva, con la posibilidad de personalizarla (aunque no he trabajado todavía mucho con la herramienta, se parece sospechosamente mucho a la de DVX).
  • Control de calidad automático, incluyendo ortografía. No sé si más tarde incluirán otros controles como la consistencia terminológica o el control de etiquetas.
  • Compatibilidad con el formato TMX y por tanto, con otras múltiples herramientas TAO (aunque he de confesar que yo no he encontrado manera de convertir las memorias que se generan en formato jtx a TMX).

Cabe destacar que la herramienta está todavía lejos de su madurez, como lo demuestran los asuntos por tratar que aparecen en la página web de la empresa. De hecho, la empresa piensa seguir manteniendo la versión Classic, que trabaja directamente en MS Word, y desarrollarla paralelamente con esta versión, hasta que esté plenamente madura o los usuarios empiecen a dejar de utilizar el editor de Word como herramienta de traducción.

En fin, veremos qué repercusión tiene esta versión. Sin duda, Wordfast cuenta con el beneplácito de la comunidad de traductores, sobre todo los autónomos, y esperamos que esta versión traiga mejoras reales que les ayuden a ser más efectivos en su trabajo (porque eficaces ya sé que lo son :) y que el señor Yves Champollion no nos decepcione…

Jan
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Empezaré confesando que ya sé que tenía el blog un poco abandonadillo, pero este último mes ha sido una locura y me ha sido imposible tomarme un tiempo para escribir alguna entrada de contenido más o menos decente… En fin, ahora que llega el final del cuatrimestre y las cosas se empiezan a relajar un poco, espero (aunque no prometo) poder volver a dedicarle algo más de tiempo e ir agregando nuevas entradas.

XLIFFEmpezaremos con algo sencillito, hoy hablaré de estándares, y en concreto de XLIFF (XML Localization Interchange File Format). Se trata de un formato basado en XML creado como estándar de localización.

Fue OASIS (Organization for the Advancement of Structured Information Standards) en 2002 quien propuso este estándar y en la actualidad puede verse la última versión de la especificación ( v1.2 del 01/02/2008) en este enlace.

En este artículo se explican las ventajas de este formato. Hoy en día los traductores debemos tratar con multitud de formatos diferentes, desde doc hasta formatos de maquetación como FrameMaker o Quark Xpress, pasando por archivos de recursos de software, que pueden ser tan diferentes como .properties, .po, .msg, .java, etc.  XLIFF se basa en la idea de la separación de contenido y formato para la traducción, simplificando así el proceso de traducción: del documento original se extraen, por una parte, los contenidos que se van a traducir (translation units) y, por otra, todos los elementos que no son traducibles (skeleton).Una vez realizada la traducción se vuelven a unir estos elementos para formar el documento final. Esto, por un parte tiene, la ventaja técnica de, como hemos mencionado, no tener que trabajar con multitud de formatos y enfrentarse a posibles problemas derivados de la no protección de etiquetas o la falta de espacio; no obstante, por otra parte, nos enfrentamos al problema de la descontextualización, al no contar con el documento original tal y como se concebió. Así pues, es recomendable, aunque nos den el texto en XLIFF, pedir el documento original o su versión en PDF como referencia.

Si os preguntáis cuál es la diferencia con TMX, estándar que ya vimos anteriormente, es que XLIFF aporta innovaciones con respecto al intercambio de información en web, además de aportar facilidades para la gestión de flujo o el control de versiones. De hecho, la información proporcionada es mucho más amplia: por un lado el número de palabras de cada segmento; por otro, información de uso de la memoria de traducción (p.e. el estado del segmento), datos de un glosario si se hubiera utilizado, información de contexto (y comentarios…) y de revisión (el estado de aprobada o rechazada (state=”user:approved” o state=”user:rejected”) de la traducción del segmento por un posiblerevisor en el proceso). Los documentos XLIFF suelen tener la extensión .xlf, o .xlz si están comprimidos.

En cuanto al flujo de trabajo con documentos XLIFF, el cliente puede generar archivos XLZ con conversores de formato como OLT XLIFF Filters (una herramienta de Open Language Tools de Sun Microsystems) desde archivos, digamos, en HTML, simplemente seleccionando y arrastrando el archivo a la ventana de la aplicación:

Se generará entonces un archivo comprimido, como hemos dicho, que contendrá a su vez tres archivos: workflow.properties, skeleton.skl (con la información que permitirá recuperar el formato original) y content.xlf.

Después el traductor traduce el archivo XLF con algún editor específico como XLIFF Translation Editor:

XLIFF Editor

Una vez traducido y hechas las modificaciones pertienentes (comentarios, glosario etc.), se exporta el archivo y se genera de nuevo el fichero traducido en el formato original, así como una memoria de traducción y un glosario si se hubiera creado.

Este artículo del profesor experto en software libre para la traducción Juan Rafael Fernández García, explica de manera detallada el proceso de traducción con XLIFF y hace una interesante reflexión sonre este formato frente a otros formatos libres para la localización como PO, que hasta ahora se mantiene como estándar. Se discuten diferentes aspectos que pueden haber contribuido a que XLIFF no se haya establecido tal y como se esperaba, aunque se dan también algunas pistas con respecto a lo que puede depararnos el futuro.

Asimismo os recomiendo el enlace de OpenTag sobre XLIFF. OpenTag es un sitio dedicado a herramientas y tecnologías libres para la localización de software, ayuda en línea y documentación, que pretende proporcionar información de interés para mejorar los procesos de localización.